Al Consejero de Fomento, le gusta el ente, por eso sonríe.
Y en Madrid, en nuestra Casa de León, dijo, hasta con gracejo inoportuno, que la Junta de Castilla y León está consolidando un “sólido” sistema de innovación autonómico.
¿Acaso se refiere este risueño personaje, con lo de la consolidación, a que ya nos tienen sometidos políticamente a los leoneses? De poco vale que nos enseñe la zanahoria del “papel esencial de León en cuanto parques tecnológicos”, la Junta nos aporta migajas de lo que es nuestro por derecho propio, conviene recordar, pues darnos no nos da nada.
Habló también de la “peculiaridad de León”, y no lo saco de contexto, simplemente tomo lo de peculiaridad para León, pues a lo sumo es lo que “generosamente nos conceden los autonomistas que nos administran desde Valladolid”, cuando León es o representa a una región en el ente autonómico, tiene y tendrá su propia identidad cultural.
En otro momento y lugar ha dicho: “La Fundación Villalar es un organismo que tiene como finalidad integrar las diferentes sensibilidades que en la comunidad autónoma están presentes y yo creo que lo está cumpliendo”.
Sensibilidad es un eufemismo que lo leoneses no podemos tolerar para nuestra Identidad Leonesa. Y la Fundación Villalar es una rebotica donde tratan de homogeneizar, incluso con deformaciones históricas, lo leonés y lo castellano. Todo esto queda dicho con rotundidad y sin vacilación alguna. En este terreno su sonrisa puede “sonar” a burla.
No hay comentarios :
Publicar un comentario