Reunión de
Rabadanes…
Va bien, para
la ocasión leonesa, el dicho iniciado. Toda vez que la Diputación provincial de
León, actuó de anfitriona de presidentes, el 14 de Mayo, y resulta que para sostener la ocasión fuimos
los leoneses, dado nuestro amarre político autonómico, los que pusimos la pieza para
degustar; el “cordero” de nuestra
permanencia en el ente.
No aludo al
manjar de reyes. El invento municipal para la capitalidad gastronómica, que es
pasajero y efímero si no se sabe acompañar de un verdadero mensaje que prenda,
no, me refiero a nuestra regionalidad leonesa que la esconden nuestros
políticos, para no molestar a quienes mandan en el ente autonómico.
Nuestros tres
presidentes, como corderos amenazados por el lobo castellano/comunitario, no fueron
capaces, no ya solo de levantar la voz leonesa regional, sino de hablar entre
ellos haciendo una valoración de la situación triprovincial. Defraudador, para quienes estamos en la
preocupación diaria de unir y reflotar lo leonés.
¿Qué quiere
decir tal postura presidencial? Está
claro que de haber en ellos algún atisbo de sentimiento leonés, no ya
leonesista que eso para ellos sería demasiado, incluso para el señor Majo, gozaron
de un momento idóneo para mostrar diferenciación y particularidades de la
región leonesa. ¡Nunca se lo han planteado! Pero eso sí, como les siguen votando, ocupan un asiento de gran relevancia provincial y que, con su proceder,
afianzan al ente.
Pero atención, si no lo dicen,
lo piensan: El sentimiento diferenciado leonés es para los ingenuos…leoneses de
a pie.
Frenar la
despoblación rural, de modo especial, y crear empleo, fue motivo aparente para
tener el encuentro que comentamos. Reunión que no tengo más remedio que colocar
como de trámite, subyaciendo un fin primordial para la Junta autonómica,
realizarlo en León como prueba de sumisión y de control al que nos tienen
sometidos.
Por la Diputación
de Salamanca acudió el vicepresidente, Carlos García, ignoro la razón. En su
boca unas sencillas ideas, “la despoblación exige
posibilidades de empleo…y generar condiciones para ello”. Contando luego que había que exigir voz en la estrategia para
combatir la despoblación de ambas facetas calamitosas. ¿Qué ha hecho en la
institución provincial para estudiar y valorar las causas? No es capaz de pensar que estar en una centralista
comunidad radique la mayor parte de los males. Por otra parte, a la Junta autonómica que nos
controla y manda, ¿qué le exige?
Para la presidenta de Zamora, María Teresa Martín, que
incide en la despoblación rural y el desempleo, como todos. Dejó dicho que ha
prestado gran atención a la dependencia, “como fuente de empleo”. Tal asistencia
es un compromiso social, una ayuda
ineludible para quienes prestan el servicio, pero como nicho de empleo no le
veo enjundia. Por otra parte en la
institución que preside parece que han llegado al convencimiento de que el
emprendimiento puede ser un buen método apara paliar la falta de empleo en el
medio rural. ¡Alusión al tema triprovincial regional leonés, ni pizca!
Para el presidente de la Diputación provincial de León,
Juan Martínez Majo, Castilla y León es una comunidad
“eminentemente de medio rural”. Ni un matiz diferenciador, y mira que los hay
entre la región triprovincial leonesa y la otra castellana. La sumisión que les
domina es terrible. Puso el foco en la pérdida poblacional que ha motivado una situación
ciudadana de gran inquietud. Tampoco ha
mostrado detalles, ni por asomo, de lo que afecta a las tres leonesas por
separado y en su conjunto.
Majo, si apuntó algo específico de León provincia, tal
vez por ser el anfitrión. Colocando como exitosa la marca “Productos de León” y
las 500 empresas participantes. Ni una palabra del daño que “Tierra de Sabor”,
de “pavor” para los leoneses, de promoción juntera y beneficiosa para el ente, útil
para marcar potencialidad, y no para los artesanos y empresarios leoneses que usan su sello.
Nada he podido
leer respecto a la desigualdad, de desempleo y despoblación, en cada una de las
provincias del ente y la comparativa interprovincial. Ahí es donde deberían
haber estado las tres leonesas, haciendo una valoración conjunta triprovincial.
Pero qué va, ¡ni la mínima intención!
Hubo más
intervinientes como el consejero de Fomento y Medio Ambiente, Suárez Quiñones,
para quien el gobierno autonómico “ha hecho los deberes”. Nadie objetó nada al
respecto ¡asumían!
Germán
Barrios, presidente del Consejo Económico y Social de la Comunidad, “con gran
precisión” dejó dicho que la solución a la despoblación se llama empleo. Y descansó
Conclusión. Se
habló de despoblación, largo y tendido, quiero decir que todos, los de “nueve
provincias una Comunidad”, (que canta el ente y los de León no lo rebaten) lo citaron, pero no dijeron ni palabra en
cuanto al cómo, ni el grado de implicación. Tan sólo mostraron “buenas
intenciones”, lo más fácil.
A tenor de lo
contado, la necesidad más imperiosa, nuestro mejor papel, el de los ciudadanos
leoneses, no puede ser otro que tratar de desactivar por vía política el dañino
estatus autonómico, mediante el voto. Nos han venido ahogando PP y PSOE y ahora
para cerrar el círculo asfixiante han llegado PODENOS y CIUDADANOS.
Hay que empezar a movilizarse ya, de cara a las elecciones locales, teniendo en
cuenta que son clave en las Diputaciones. Y por supuesto para las autonómicas, donde, no tener presencia importante leonesa,
leonesista en las Cortes, sería un
suicidio para el Pueblo Leonés, cuando, dada la posible reforma de la
Constitución, será la ocasión óptima en la que defender la inscripción nominal de
la Región Leonesa y su derecho autonómico.
¿Qué estamos
dispuestos a hacer triprovincialmente para reconducir la situación?