Un punto de interés histórico, añadido, supieron ponerlo en la magnífica manifestación en defensa del sistema concejil, los de Puebla de Lillo con su pancarta reivindicativa.
En ella nos mostraban junto a tres SÍ rotundos, una fotografía
muy interesante: Una copa concejil. La podemos ver colocada, puesta en valor,
sobre un paño adamascado, de color en la gama de nuestro púrpura leonés.
Los
síes son la afirmación de lo que han sido y deben seguir siendo los Concejos:
. Protección
de lo comunal, que se ha recibido en herencia, defendido y protegido.
. Conservación
del proceder democrático más directo, y bien representativo en nuestra cultura
leonesa: la faceta concejil. Los Concejos Abiertos.
. Y vida, sí vida, para los pueblos leoneses, donde lo comunal es participación
decisoria y vivencial, y ahora lo puede ser más que nunca.
En
cuanto a la copa concejil, que es de suponer, conservan a buen recaudo, será
con la que sus antepasados medievales y los no tanto, cerraban el concejo
abierto, en el que se habían “tramitado” en pura democracia los asuntos
locales, con un trago, más o menos largo, del vino de la concordia.
Guardada no
sé si bajo tres llaves, como se ha dicho que antaño se hacía, junto a las
Ordenanzas concejiles y cuanta documentación se iba generando en el desarrollo
de los concejos, y puede que también al lado de la vara de mando.
Los
acuerdos tomados eran ley, y su cumplimiento una obligación, y así por lo
general se hacía, si bien a los que faltaran al compromiso se le impusiera
algún tipo de sanción. De ahí que si ésta era aportar vino al concejo, al final
era el que se apuraba a sorbos por los comparecientes.
Las copas concejiles son un símbolo de la verdad de los Concejos
¿Cómo pueden los políticos del gobierno central, querer anularnos ahora los históricos Concejos? ¡¡Vienen a por nuestro patrimonio!! la defensa ha de ser plena, compartida y firme, así venceremos.
No hay comentarios :
Publicar un comentario